PREPARA TUS EVENTOS DE NETWORKING
El Networking está considerado esencial para las oportunidades profesionales y ampliar la red de contactos. Esta habilidad, es además una cualidad profesional muy valorada en distintos ámbitos profesionales. Las empresas de consultoría, servicios, o venta de productos, valoran más a empleados capaces de utilizar sus habilidades de networking orientadas a conseguir nuevos clientes para la empresa, o para reclutar a los mejores candidatos.
Muy probablemente hayas acudido a infinidad de eventos de Networking y es posible que en algunos, no lograras tus objetivos. Para que el próximo que acudas sea todo un éxito y puedas generar nuevas oportunidades profesionales, te ofrecemos algunas pautas para realizar un networking efectivo.
Antes del evento
Selecciona el evento correcto. Es importante seleccionar bien los eventos a los que te interesa acudir, ya sea por el sector, modo de emprendimiento, cantidad de inversión que se esté valorando, temática, los colectivos que acuden, los participantes, por afinidad, por los ponentes, por las áreas de mejora que te pueden aportar, por el papel que puedes jugar en ellos…
Establece tu objetivo. Antes de ir al evento, lo más importante será establecer los objetivos que quieres conseguir en el mismo. Saber qué áreas nos interesan personal y profesionalmente. ¿Qué quieres conseguir del evento: financiación, clientes, promoción, reconocimiento? ¿Te va a aportar valor añadido? ¿Puedes aportarlo tú? ¿Tiene sentido dentro de tu estrategia personal o profesional?
Identifica a los participantes. En muchos eventos, la lista de los ponentes y de los asistentes se hacen públicas previamente. Tómate un tiempo para identificar a aquellos que te interesa conocer y busca información en la red, tanto en los buscadores como en las redes sociales. Identifica su imagen, lee sus blogs, hazte seguidor de ellos. Esta información te servirá no sólo para captar su interés, sino también, y sobre todo, para encontrar puntos comunes con los que romper el hielo a la hora de presentarte.
Prepara tu presentación o elevator pitch
Entre unos 30/ 60 segundos, debes poder contar quién eres, qué haces, para quién o para qué lo haces y qué vas a hacer en los próximos cinco años. Ten en cuenta que se estima que en 60 segundos entran entre 150 y 220 palabras, así que calcula la mitad para tus presentaciones en frío en el evento.
Prepáratelo muy bien, con palabras sencillas, fáciles de entender y persuasivas (beneficio, logro, resultados…). Un buen recurso es contarlo en forma de pequeña historia y que sea muy visual.
En el caso de que tu actividad empresarial esté relacionada con las tecnologías, prepárate dos o tres frases que resuman bien tu tecnología y valor añadido. Van muy bien las comparaciones, ayudan a visualizar lo que se está haciendo, ya que no puedes entretenerte en explicar la tecnología, tampoco abuses de ellas. 😉
El elevator pitch tiene que incluir el nombre de la empresa, sector, producto o productos de los que tratas, el equipo que está detrás, tu valor diferencial (una patente, un reconocimiento, una nueva forma de distribuir) incluso no está de más que menciones a tu competencia, dará muestras de has analizado bien tu sector.
Durante el evento
Has llegado al evento y es el momento de trabajar el Networking. Éstas son nuestras recomendaciones. Cuándo presentarse. Sobre este aspecto no hay unanimidad entre los expertos. Te damos tres opciones:
En una conferencia. Si tu objetivo principal es alguno de los miembros de la mesa redonda o de los ponentes, el turno de preguntas puede ser un buen momento para romper el hielo con los asistentes La pregunta que plantees tiene que ser oportuna e interesante. Si no es ninguna de las dos cosas, es mejor no formularla. Y por supuesto no ha de incluir ninguna referencia a tu empresa, servicio o producto. Es mejor que sea una cuestión abierta relacionada con el contenido de la conferencia, el sector o la especialidad del conferenciante.
En los momentos de descanso. Éstos suelen ser los tiempos especialmente pensados para iniciar el networking. El problema que puedes tener aquí, es que todo el mundo querrá hablar con las personas más interesantes y tendréis que esperar vuestro turno. Observa a tu alrededor y comprobarás que la mayoría está en la misma situación que tú. Un comentario sin importancia delante de la bandeja de canapés sirve para tender puentes 😉
Eventos Networking. Si acudes a un evento donde la organización ha destinado una parte del programa al Networking, o bien el acto es el objeto del mismo, estás de enhorabuena! Ya que muy probablemente esté todo coordinado para facilitar la interactuación entre los asistentes. Déjate llevar!
En un evento, existen múltiples formas de realizar un Networking profesional, a través de dinámicas, actividades lúdicas, zonas concretas para el “face to face” & elevator pitch, en grupo, en privado, con speakers y un largo etcétera.
En cualquier caso, es conveniente que esté organizado y dirigido por profesionales. Ellos marcarán la creatividad, los espacios y el tiempo, de este modo tú, tan solo tendrás que centrarte en ti y en tu empresa.
Cómo presentarse
Lo ideal es ser presentado por otra persona con el que tu “objetivo” ya tenga algún tipo de vinculación. Puedes intentar buscar algún cliente de él que conozcas, algún emprendedor en el que ya haya invertido (en el caso de inversores), algún proveedor e intentar que sea él quien te presente.
Si no conoces a nadie, debes presentarte en frío y para eso es cuando resulta fundamental el encontrar el punto de conexión, el terreno común con tu interlocutor y que te permitirá generar inquietud en la otra parte para que participe en la conversación.
La primera impresión
Cuida tu apariencia e higiene. Parece obvio, pero hay personas que descuidan hasta los pequeños detalles: traje y/o corbata inadecuados, pelo despeinado, zapatos sucios, olor a tabaco…
No hay que olvidar que nuestra imagen nos representa, tanto a nosotros como a nuestra empresa y a nuestro producto o servicio, y es importante que sea lo más agradable posible.
Respeta el espacio personal. Aunque sea un evento muy concurrido, debes procurar no ocupar ese espacio que toda persona necesita a su alrededor para no sentirse invadido.
Observa los círculos. Debes saber diferenciar cuando dos personas están en informal conversación y cuando es una charla más formal, para no interrumpir. Lo mejor es mantenerse prudencialmente cerca a la espera de que alguno de los dos se dé cuenta de que quieres un minuto. En ese momento, cuando te miren, es cuando puedes interrumpir.
Cuidado con Improvisar. El networking exige una preparación previa importante, tanto a la hora de seleccionar e identificar a las personas con las que queremos contactar, como a la de elaborar nuestro elevator pitch, de manera que el mensaje que queremos que llegue al otro no se distorsione o no cumpla su objetivo. Encomendar cualquiera de esos aspectos a la improvisación suele ser una pérdida de tiempo.
Tu imagen. Es muy importante adecuar tu look al evento al que vas a acudir. Es fundamental entender que deberás utilizar la técnica del camaleón y adaptarte al ambiente. Si vas a un evento de programadores o de directores creativos, sobra el vestuario demasiado formal. Y al revés, si vas a un encuentro con inversores, debes cuidarte de no llevar prendas extravagantes o excesivamente llamativas. Ahora bien, ante la duda, siempre es mejor pecar de formal.
Frases a evitar
- “Mi solución/proyecto/idea/iniciativa es la mejor que existe”. Esta frase suele provocar un rechazo inmediato.
- “No hay competencia”. Refleja que no has investigado bien tu mercado.
- “Mi idea es única”. En este caso, lo que va a tener éxito es la ejecución, no la idea.
El tiempo justo. Los eventos son para realizar un networking, no obstante deberás tener muy en cuenta el tiempo estipulado por la organización.
Evento con espacio networking el tiempo deberá ser de 3 a 5 minutos con el que ganar más tiempo en un futuro próximo.
Evento con prioriodad al networking: el tiempo lo marcará la organización que previamente habrá informado a los asistentes.
La dinámica debe ser: presentarte/obtener puntos de información/transmitir tus dos ideas principales y marcharte. La clave está en ser muy respetuoso con el tiempo ajeno.
Se recomienda aprovechar el momento del contacto para tomar notas en el reverso de la tarjeta de visita de los puntos más importantes de la conversación (tamaño de la empresa, puesto, intereses, afinidades, expectativas).
Una vez en casa o en el despacho, completa esa información con toda la que habías recabado previamente o realiza una investigación de esta persona. Agrégale a tus redes sociales y síguele en Twitter.
Etiqueta los contactos (sectores, VIP, consejeros, primeras aproximaciones, CEO, lo que se te ocurra) y no olvides señalar el evento y la fecha en que lo has conocido. Recuerda que se trata de crear tu propia base de datos.
Retoma el contacto lo antes posible. No es cuestión de agobiar al personal, pero hazlo cuando aún el recuerdo esté caliente. Las comunicaciones a posteriori deben ser breves e inmediatas, en las 48 primeras horas. Cuanto más tiempo pase, más probabilidades hay de que se olvide. Basta con enviar algún enlace a algún artículo que haga referencia a algo que se comentó en el evento, o invitarle a algún otro encuentro común. Incluso puede ser algún tema más personal, si has identificado algún tipo de afinidad.
Haz pronto los deberes. Si has conseguido que alguno de tus interlocutores te conceda unos minutos para analizar tu propuesta o leer tu proyecto, debes enviárselo de inmediato.
En este caso, el plazo se rebaja a 24 horas e incluso menos. Envía un resumen ejecutivo de no más de un folio para que se haga una idea de tu valor diferencial. Y si es un proyecto y tienes una demo, vídeo o link, muchísimo mejor.
Si te vuelves a encontrar con algún contacto a los tres meses, es importante saludarle y comentarle cómo ha evolucionado tu proyecto, tu empresa, tu producto en este tiempo.
Repite la experiencia. Los expertos coinciden en recomendar que se acuda de forma más o menos frecuente a este tipo de eventos. Suerte! 😉